En Argentina, el 95% de los incendios son causados por actividades humanas. Como los delitos ambientales no están tipificados en el Código Penal, los incendios intencionales quedan impunes.
"Cuando el daño ambiental se produce, en muchos casos, es irreparable. Por eso hay que trabajar en la prevención; pero cuando ya sucedió, tiene que haber una pena porque sino es muy fácil que se vuelva a producir", afirmó Andrés Nápoli, director ejecutivo de FARN en una entrevista para Radio Nacional.
El costo de combatir los incendios es enorme: no solo es un tema de presupuesto, sino de vidas humanas y biodiversidad. Necesitamos priorizar un enfoque preventivo de manejo del fuego y que los responsables de comenzar los incendios reciban sanciones proporcionales al daño causado.
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